miércoles, 30 de junio de 2010

Ser Mejores

Diferenciarnos de los demás positivamente, por ser mejores seres humanos, es un objetivo primordial en nuestras vidas que sólo se consigue con nuestro esfuerzo personal.
No existen en el mundo 2 personas iguales. Tal vez físicamente pueden encontrarse 2 personas idénticas pero jamás existirán 2 seres humanos que piensen, actúen y se expresen de la misma forma. En un mundo tan competitivo como el que apreciamos en la actualidad, es de suma importancia diferenciarnos de las demás personas y sobresalir por nuestra "calidad".
Esta "calidad" puede verse traducida en la forma como tratamos a las otras personas, en cómo actuamos ante las diferentes situaciones que se presentan en nuestro camino, en las ideas que expresamos diariamente y en la manera como realizamos las diferentes funciones o tareas que se nos han encomendado.Dependiendo de cómo y con qué calidad realicemos estos actos, seremos reconocidos positiva o negativamente.
Es innegable que cada uno de nosotros debe luchar por algo. Debemos luchar por sacar adelante nuestra familia, la empresa donde trabajamos, etc., pero en algunas ocasiones olvidamos nosotros mismos salir adelante. La mejor forma de hacerlo es convertirnos en personas con alta inventiva, atentos a los cambios que se aproximan, velando por la buena relación con las demás personas y siendo muy emprendedores.
Definitivamente, todo parte de nuestro esfuerzo personal. Si no nos trazamos unas metas y luchamos por conseguirlas, muy difícilmente estaremos orientados y, por el contrario, nos sentiremos como si fuéramos por esta vida sin rumbo fijo. Es indispensable que mejoremos en algo día a día y no nos estanquemos haciendo, pensando y expresándonos siempre de la misma manera.

jueves, 10 de junio de 2010

Pensar Positivo

Nuestro cerebro puede cambiar de forma radical nuestras vidas, quién no se ha dado cuenta que cuando comienza a llegarle un pensamiento negativo, este arrastra otro, y después otro, y otro…y cuando nos queremos dar cuenta parece que todo lo que nos rodea es malo, triste, negativo…Cuantas veces nos ha pasado que conocemos a alguien que siempre hacer críticas negativas de otros, de forma continua y aunque nosotros no seamos así, un buen día nos damos cuenta que estamos teniendo el mismo comportamiento, que si a Ana no le sienta nada bien esa falda, que si Pedro es horroroso y mala persona. Entramos en un círculo de negatividad que lo único que hace es alimentar a nuestra mente de ideas y sentimientos negativos que empezarán a repercutir en nosotros rápidamente, tanto física como emocionalmente.Si mantenemos una actitud negativa ante la vida, raro será que algo nos salga adecuadamente, todo nos parecerá poco, mal y desagradable. La vida nos castigará, pero no es así nos castigaremos nosotros solos.Si ante un problema analizamos la forma de enfrentarse a él una persona positiva y una negativa, es probable que todos podamos intuir los resultados. Una persona positiva se enfrentaría a él sin dejarse afectar por el problema, lo tomaría como un reto, no como una derrota o como una carga sin más. Por supuesto que son conscientes de que quizá puedan no resolverlo, pero eso será lo último que se pase por sus cabezas. Actuarán para resolverlo de la forma más optimista posible, es decir, lo toman de tal manera que intentan aprender lo más posible de todo lo que ha acontecido, porque quizá ese aprendizaje les sea útil en el futuro.Esta comprobado que nuestros pensamientos son los gobernantes de nuestras acciones, si piensas que lo que te rodea es malo, obrarás en consecuencia y probablemente seas desconfiado y estés disgusto la mayor parte del tiempo Pero si procuras encontrar algo bueno en lo que te rodea, habrá una luz de esperanza y alegría dentro de ti, y probablemente esa luz sea la que cambien tu vida y saques partido de lo que tienes delante de tu camino.Si estamos continuamente pensando en negativo, nuestro organismo se mantendrá en alerta, ya que entiende que hay algo extraño que nos puede dañar, con lo que aumenta la tensión y el nerviosismo en nosotros. Nuestro cerebro estará más pendiente de lo que nos puede amenazar que en pensar con claridad sobre nuestras metas y nuestra vida. Además si nos paramos a pensar fríamente, cuando estamos negativos, sacamos todo de contexto, lo desproporcionamos, lo exageramos, y pasa de malo a horriblemente malo, y lo que es un simple problema pasa a ser una hecatombe.Como vemos, lo único que ganamos con pensar de forma negativa es la imposibilidad de disfrutar de la vida, sigue el mejor tratamiento para ti, saca esas formas negativas de pensar.

martes, 1 de junio de 2010

Los mismos niños de Siempre

Entre la inocencia de la infancia y la dignidad de la madurez encontramos una encantadora criatura llamada niño.
Los niños vienen de diferentes medidas, pesos y colores, pero todos tienen el mismo fin, disfrutar cada segundo de esa pequeñez, saltar, correr, brincar, comer helado, pegarse un chicle en el pelo, andar con la cara sucia ese es un verdadero niño.
En la actualidad se dice que “los chicos de ahora son diferentes".Yo No lo creo. En esencia siempre son iguales. Sin embargo, los que han cambiado son los adultos y ese cambio genera situaciones nuevas y desconocidas.Entonces, ser niño actualmente es un oficio difícil y las nuevas generaciones tienen que adaptarse a las exigencias que les impone la sociedad.Leyendo hace varios días un artículo en la internet decía que según, el Marketing ha descubierto un punto importante: el niño es un "consumidor". Y, si bien no es el decisor de la compra, es quién ejercerá la presión en los adultos para que esta compra se realice. Por otro lado, los padres ya no tienen claro qué significa educar un hijo. Las generaciones anteriores, equivocadas o no, con buenos o desastrosos resultados, sabían qué clase de adultos deseaban que fuesen sus hijos y la educación se orientaba hacia esa meta.Por otro lado se los limita y controla en muchos aspectos en los que se deberían ayudarlos a crecer, a independizarse, a recorrer de la mano de los adultos, en forma gradual y progresiva, ese camino que va de la independencia a un estado de mayor autonomía.En otros casos, se los estimula más allá de lo que corresponde a su edad y madurez. Tal es el caso de la sexualidad, permitiendo que tengan acceso a películas, series, publicidades, revistas, etc., sin olvidar los supuestos espectáculos o programas televisivos donde se muestran situaciones adultas trasladadas a la infancia, como si fuesen la realidad del niño que termina trasplantándolas a su vida cotidiana, aunque no pueda ser capaz de entenderlas y manejarlas.Y no olvidemos
las exigencias de rivalidad y competencia a las que son sometidos, tanto en los deportes como en los estudios; exigencias que terminan por suprimir todo placer por el juego sano. También se anula la auténtica relación con el conocimiento, ya que los chicos se ven obligados a estudiar para el maestro y para los padres y obtener buenas notas como se obtiene un trofeo, en lugar de aprender para saber y para que les sirva en la vida cotidiana.Las niñas de hace dos generaciones jugaban a "la mamá" y ese juego les permitía identificarse con su realidad y poder asimilarla. Así ellas se ponían en el rol de su propia madre y el muñeco eran ellas mismas.Pero las muñecas modernas ya no son bebés, sino mujeres adultas con cuerpos adultos.
Pero sin embargo ¡son los mismos niños de siempre!
Lo más importante es que crezcan en un ambiente libre de negatividad e impulsados a tener confianza y a expresar su propio ser.
Enséñalos a decir la verdad, a ser honestos y sinceros.